martes, 20 de agosto de 2013

VACACIONES DE VERANO EN PRAGA




Este año el destino escogido para las vacaciones de verano ha sido Praga: la capital de la Republica Checa. El medio de trasporte  que utilizamos para ir a Praga fue el avión, el vuelo fue a las siete y cuarto para salir a las nueve.
Para ir al aeropuerto fuimos en taxi, cuando llegamos facturamos las maletas y esperamos hasta la hora de embarque, el vuelo duró dos horas y cuarto. Cuando llegamos al aeropuerto de Praga recogimos las maletas y fuimos a buscar al chofer que habíamos contratado para que nos llevara hasta el hotel.
En el hotel dejamos las maletas y nos fuimos a cenar, después de la cena volvimos al hotel a dormir.
El día siguiente lo dedicamos a pasear por la ciudad para hacernos una idea general de la misma, paseamos por el puente de Carlos y la orilla del  rio, después nos fuimos a comer y a echar la siesta al hotel, y luego volvimos a pasear por la ciudad viendo el reloj astronómico, que es un reloj especial, porque cada hora suena la campana y salen los apóstoles, la muerte y el gallo anunciando la
hora.

Después estuvimos andando un poco mas hasta la hora de la cena, cenamos y nos fuimos al hotel a dormir ya que al día siguiente teníamos la excursión al castillo de Praga.
El martes después de desayunar fuimos al castillo a hacer una visita guiada.
El castillo es un gran lugar que sirvió de fortaleza , en el castillo esta la catedral de San Vito y el callejón del oro.
Pero antes de empezar la visita la guía nos contó como fue la historia de la fundación de La Republica Checa y la ciudad de Praga.
La catedral era muy grande y pudimos ver las vidrieras que eran muy bonitas y también algunas tumbas.
Al acabar la visita nos despedimos de la guía y dimos un paseo por el callejón del oro, después del paseo fuimos a comer y por la tarde estuvimos paseando por el puente de Carlos, nos tomamos unos refrescos en un bar y después y  nos fuimos a cenar, un paseo y de vuelta al hotel.
El miércoles nos tocó el turno de ir a visitar el barrio judío, en el visitamos todas las sinagogas que había, todas eran parecidas pero a mi la que mas me gusto fue la Española.
Después fuimos a ver el cementerio judío de Praga, en el dimos un paseo por las tumbas y después nos fuimos a comer y a dormir la siesta al hotel.
Después de la siesta salimos a la calle otra vez a pasear y de nuevo a cenar y al hotel.
El jueves fuimos al teatro negro para ver la obra de Franskestein, pero como el teatro no era hasta las ocho de la tarde, estuvimos paseando por la ciudad hasta las ocho, la hora del comienzo de la función.
El teatro negro es un estilo de representación  muy distinto al que conocemos, no hay diálogos y lo mas importante es lo visual y lo que pasa en el escenario, la función me gustó. Cuando termino fuimos a cenar a un restaurante cercano al teatro, seguido al hotel a dormir, a descansar para poder ver mas cosas al día siguiente.
El viernes fuimos a ver el campo de concentración de Terezin.
El medio de trasporte que utilizamos fue el autobús, por lo tanto tuvimos  que madrugar un poco para llegar a tiempo al autobús.
El viaje duró uno hora y cuarto, al llegar al pueblo lo primero que hicimos fue ir al museo del campo de concentración, allí nos indicaron donde estaban los barracones, las cámaras de gas y donde trabajaban los judíos.
Pero la tarea de encontrar esos sitios fue misión imposible, cuando ya habíamos desistido de la búsqueda apareció una amable señora del pueblo que nos indicó donde estaban los sitios que buscábamos, le dimos las gracias y gracias a ella encontramos lo que buscábamos, pero al llegar nos dimos una gran decepción: en vez de encontrar los barracones, las cámaras de gas y salas de tortura nos encontramos con una simulación de los barracones, las cámaras de gas...
Al terminar de ver esto fuimos a visitar el cementerio donde estaban enterrados los cuerpos de los hombres  en el campo.
Luego nos fuimos a comer y como en el pueblo no había ningún restaurante no nos quedo mas remedio que ir a comer a un cutre cuchitril de carretera.
Después de comer cogimos el autobús y el metro y regresamos de nuevo a Praga, cenamos y nos fuimos al hotel.
 
El sábado decidimos ir a dar un paseo en barco pero primero fuimos a ver algunas cosas que son un poco chorras pero que teníamos curiosidad por verlas, vimos el hombre colgado, la calle mas estrecha, el muro de John Lennon y las casas danzantes.
Luego fuimos a dar el paseo en barco, me gusto mucho, porque pude ver de nuevo la ciudad desde otra perspectiva, al terminar la visita fuimos a comer y después fuimos al hotel a dormir la siesta.
Después de la siesta fuimos a tomar un chocolate caliente, dimos otro paseo, cenamos y fuimos al hotel.
El domingo llego el día que nadie quería: el de volver a casa, hicimos las ultimas compras, comimos, abandonamos el hotel y esperamos al chofer que nos llevaría hasta el aeropuerto.
Cuando llegamos al aeropuerto facturamos las maletas y después embarcamos en el avión, no tuvo retraso y en dos horas y cuarto estábamos en Bilbao. Cogimos un taxi que nos llevo a casa y aquí acabaron mis vacaciones de verano hasta el año que viene.
 
 

 

No hay comentarios: